¿Obligación...? Capitulo 2: Confusión

Bueno aquí la segunda parte ^-^

Capitulo 2

Confusión

Estando en la sala común de Slytherin, Draco y Blaise estaban sentados en los cómodos sillones de cuero negro.
– ¿Por qué diablos me tocaste Zabini? –Preguntó Draco sin dejar de observarlo
–Todavía lo preguntas... ¿no viste su reacción? –Contestó con una sonrisa burlona
–Tal vez se impresiono, puede ser cualquier cosa –dijo el rubio sin interés.

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En la sala Gryffindor estaban los amigos de Harry platicando, sentados en los sillones frente a la chimenea.
– ¿No creen que Malfoy esta extraño? –Preguntó Harry
–La verdad está bien así, esa maldita lombriz por fin nos dejo de fastidiar –respondió Ron
–Pero qué tal si trama algo –Argumento el ojiverde
–Yo opino como Ron –dio su aportación Ginny abrazando la cintura del ojiverde
–Yo se que trama algo y lo averiguare –dijo Harry quitando las manos de la chica para salir de aquella sala, buscando un lugar donde pudiera pensar.

Decidió ir al lago, pues a esa hora no habría nadie, necesitaba pensar acerca del porque estaba tan interesado en Malfoy. Cuando llega se recostó en el pasto, mirando el cielo, segundos después cerró sus ojos, dejando que el aire acariciara su rostro y revolviera su cabello. Sin darse cuenta que un rubio lo observaba escondido tras un árbol.
*Se ve tan hermoso... ¿sus labios serán suaves?... su piel... ¡¿PERO QUE DIABLOS ESTOY PENSANDO?!*
Mientras Draco pensaba eso, no sé dio cuenta de que se acercaba a donde estaba el león, quedando a menos de un metro de distancia. El ojiverde al notar una mirada sobre su cuerpo abrió los ojos encontrándose con el Slytherin.
– ¿Malfoy... qué tanto me miras? –El rubio al escuchar eso mostro una mirada sin interés y aburrida
–Que yo recuerde puedo estar donde quiera... o ¿tal vez te pongo nervioso Potter? –dijo sentándose al lado del pelinegro, mirándolo a los ojos, Harry se sentó con el entrecejo fruncido
– ¡Claro que no!... me da igual lo que hagas –antes de que le pudiera contestar escucharon pasos, los dos voltearon, encontrándose con un Severus Snape que iba hacia ellos.
–Malfoy acompáñame –dijo el profesor a una distancia corta, dirigiéndole una mirada al ojiverde se alejo.
El rubio ni siquiera volteo a ver a Harry, sabía que el lord lo llamaba
* ¿Por qué cada vez que Draco está cerca me pongo más nervioso?... ahora es como si necesitara que me mirara... ¡maldita sea! ¿Qué me pasa?*

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Cuando llegaron a los limites de Hogwarts, dos personas se desaparecían para después aparecer en frente de una mansión, el rubio la conocía muy bien y los dos individuos se pusieron las mascaras que los identificaba como mortifagos. Entraron para encontrase con un pasillo enorme, caminaron por él sin saludar o mirar a las demás personas que se encontraban ahí, llegaron a una puerta a la cual tocaron para después entrar.
Se encontraron con una habitación grande, al fondo se podía ver una silla y en ella se encontraba Lord Voldemort, se acercaron y se hincaron en frente de este hombre con las cabezas agachadas
– ¿Cómo vas con la misión Malfoy? –Preguntó sin ninguna expresión en su rostro
–Potter esta confiando en mi señor, es sólo cuestión de tiempo –respondió, aunque en su interior sabia que eso era mentira
–Sabes que a Lord Voldemort no se le miente por que él siempre sabe la verdad... ¡CRUCIO! –sin esperar la maldición, Draco cayo al suelo retorciéndose por el intenso dolor que tenia en cada parte del cuerpo.
Voldemort no dejo de decir la maldición hasta que pensó que eso era suficiente para que no volviera a mentir, cuando acabo de esto el joven mortífago estaba muy débil, por lo que se levanto lentamente para volver a quedar hincado.
–Espero que con eso entiendas, si no te apresuras con ésta misión matare a tus padres... ahora largo de aquí –. Las dos personas se levantaron e inclinaron la cabeza para después salir de ahí. Cuando estaban fuera de la mansión el rubio se quito la mascara notando el sabor de su sangre por sus labios
– ¿Estás bien? –Preguntó su profesor, el chico asintió sin levantar la vista, no quería que nadie se diera cuneta de su estado
–Pues vámonos –sin más las dos personas desaparecieron.

Cuando llegaron a Hogwarts los dos hombres tomaron rumbos diferentes, el rubio se dirigió hacia un salón, cuando entro cerró la puerta y se recargo en la pared.
Cerró sus ojos tratando de pensar en el porqué no quería ver a Potter en las manos del señor oscuro, imaginándose las torturas que le harían… eso era algo que no querría que le ocurriera.

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Harry caminaba por los terrenos de Hogwarts decidido a no pensar, algo que no consiguió
* ¿Por qué Snape se llevo a Draco y a donde se lo llevaría?, ¿por qué me preocupa tanto?*

Con ese pensamiento camino hacia el castillo, queriendo estar solo. Entrando se fijo en un salón que debería estar sin nadie dentro, por lo que ingreso cerrando la puerta y sentándose en el suelo, pensando en Draco
* ¿Qué me pasa contigo Draco?, en el lago si no hubiera sido por Snape lo hubiera besado... pero a mí me gusta Ginny. Aunque hace días que no me gusta estar con ella, y si estoy con ella pienso en él... pero ¿por qué no me daba cuenta? Supongo que era por que antes cada que nos encontrábamos me insultabas o me dirigías miradas pero ahora NADA*

De repente escucho como la puerta se abría y se cerraba, levanto la mirada y se encontró al Slytherin que no se dio cuenta de su presencia, vio como se recargaba en la pared y cerraba sus ojos. Al Gryffindor esto le encanto, se veía como un ángel, pero se dio cuenta que tenia el labio partido y sangraba, después observo toda su cara y noto que estaba más pálido, se levanto sin hacer ruido, acercándose hasta llegar frente al rubio mirando por primera vez una expresión de inquietud y desesperación, él quería que estuviera bien, quería verlo fuerte, pero en ese momento descubrió que sólo conocía un lado de Draco.
* Quisiera conocer todo de ti... tocar tu piel y descubrir si es tan suave como se ve*
Pensando esto acerco una mano al rostro del rubio acariciando la mejilla, Draco al sentir esa caricia abrió los ojos y se encontró con unas pupilas verde esmeralda, que lo miraban con preocupación y ¿ternura? Pensando que estaba imaginando cosas dejo que el otro chico continuara con las caricias, cerrando sus ojos nuevamente mientras recargaba su mejilla en aquella mano tan suave para él. Harry con su dedo pulgar empezó a acariciar los labios del Slytherin
*Son tan suaves... quisiera besarlos*
Teniendo esto en sus pensamientos con su otra mano quito el resto de sangre sobre aquellos labios y barbilla, para después poner su mano sobre la cintura del rubio acercando sus cuerpos.
Lentamente se fue acercando al rostro de Draco, ambos sintieron sus respiraciones, el rubio dijo
–No te vallas... no me dejes como las demás personas –cuando escucho esto le pareció tierno
–No te dejare... –dijo volviendo a unir sus labios sobre los otros notando la suavidad y lo cálidos que eran. Draco al sentir esto descubrió que no era su imaginación, por lo que abrió los ojos, viendo a Harry intento alejarse
–Y-yo... lo siento –dijo agachando la mirada, Harry estaba a punto de abrazarlo, pero escucho que alguien lo llamaba por el pasillo
– ¡Harry!... ¡Harry! –Cuando escucho esto Draco sintió un dolor en su pecho
*Esto duele más que cualquier maldición... he sido tan estúpido como para pensar que estaría conmigo, quien querría estar conmigo si ni mis propios padres me quieren, sólo les sirvo para que me presuman como trofeo*
Harry no sabia que hacer Draco lo confundía pero aún era novio de Ginny, observo como el rubio se dirigía a la puerta abriéndola
–Creo que te busca tu novia... no digas cosas que no cumplirás –termino de decir esto y salió de ahí para dirigirse a su sala común.

Harry se quedo parado, enojado consigo mismo al no ser capaz de detener al rubio, en eso sintió unas manos que le rodearon el cuello pensando que era el rubio, sonrió como nunca lo había hecho
–Veo que te alegra que este contigo.
Al reconocer la voz de la chica trato de alejarse, pero solo consiguió que su novia lo juntara más a su cuerpo.